Hola personas...
Lo que son las cosas, os vengo a hablar de un libro cuyo título se me antoja ahora como algo personal. Porque puede que ahora haya una luz que yo mismo no puedo ver con todo lo que está ocurriendo a mi alrededor. Quizá todo sea algo que tenía que suceder en vista de mi trayectoria en los últimos años. Y es que la vida es así. ¿Realmente escogemos nosotros el camino a nuestro destino o damos vueltas por distintos senderos que que nos llevan finalmente al mismo punto? El caso es... ¿Creéis en el destino? No sé... quizá por eso yo me encuentro siempre en un cruce de caminos...
Olvidémonos de dudas existenciales de mi presente y futuro pero no nos olvidemos del pasado y trasladémonos a la segunda guerra mundial de la mano de la novela La luz que no puedes ver. Una preciosa obra con dos protagonistas profundos y bien perfilados.
Interpretación personal de Teodoro de la portada de la novela con el fondo del artista Koeen Lybaert |
Sinopsis
Marie-Laure vive con su padre en París, cerca del Museo de Historia Natural, donde él trabaja como responsable de sus mil cerraduras. Cuando, siendo muy niña, Marie-Laure se queda ciega, su padre le construye una perfecta miniatura de su barrio para que pueda memorizarla gracias al tacto y encontrar el camino a casa. A sus doce años, los nazis ocupan París y padre e hija tienen que huir a la ciudad amurallada de Saint-Malo. Con ellos se llevan la que podría ser la más preciada y peligrosa joya del museo.
En una ciudad minera de Alemania, el joven huérfano Werner crece junto a su hermana pequeña, cautivado por una rudimentaria radio que ambos encuentran. Werner se convierte en un experto en construir y reparar estos aparatos cruciales para los nuevos tiempos, un talento que no pasa desapercibido a las Juventudes Hitlerianas.
Siguiendo al ejército alemán, Werner deberá atravesar el corazón en guerra de Europa. Hasta que en la última noche antes de la liberación de Saint-Malo los caminos de Werner y Marie-Laure por fin se crucen. Y sus vidas cambien para siempre.
Portada original de la edición española de la novela |
Sobre el autor
Anthony Doerr nació y creció en Novelty (Ohio). Se interesó por primera vez en la literatura cuando su madre le leyó Las Crónicas de Narnia de C.S. Lewis. Estudió en University School, una escuela privada de solo chicos. Se licenció en historia en el Bowdoin College y se graduó en 1995. Hizo un máster en la Bowling Green State University. Antes y después de la universidad, trabajaba y viajaba a varios lugares del mundo, entre ellos Alaska, Nueva Zelanda, Kenia y las Islas de Barlovento. En muchos sitios se ganó la vida haciendo pequeños trabajos, por ejemplo en las granjas de ovejas, como cocinero en Telluride, Colorado y en una fábrica en Ketchikan. Su mujer, Shauna Eastman, es nativa de Idaho. Se conocieron en Bowdoin College y tuvieron dos niños gemelos.
Hoy en día, es residente de Boise, Idaho y contribuye a menudo a The Morning News, un periódico en línea; además, escribe una reseña bimensual sobre libros relacionados con la ciencia para el Boston Globe.
A lo largo de su vida de escritor ha ganado varios premios por sus libros. Su primer éxito fue The Hunter's Wife, un relato corto que publicó en el periódico The Atlantic en 2001. En 2014, Doerr publicó La luz que no puedes ver, que en 2015 ganó el Premio Pulitzer. La junta del Pulitzer lo alabó como "una novela imaginativa e intrincada sobre los horrores de la Segunda Guerra Mundial, escrita en capítulos breves y elegantes que exploran la naturaleza humana y el poder contradictorio de la tecnología".
Sobre la obra
La luz que no puedes ver es una obra que te arrastra por la emoción. Es valiente, desgarradora y extrañamente alegre. Te sitúa en la época haciéndote olvidar todo lo que sabes. Te hace sentir la angustia de la guerra, la angustia de los inocentes y sobre todo la impotencia de ver cómo todos se ven involucrados en algo inevitable. Marie-Laure y Warner son unos personajes muy bien elaborados. Su evolución en la historia es tangible y te hace querer saber que pasa en cada momento. A pesar de esa alegría que se refleja en pequeños instantes no creo que sea un libro de esperanzas, más bien, de como unas pocas personas pueden cambiar el rumbo en momentos tan caóticos donde nada puede tener sentido.
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